Nuestras mascotas merecen vivir una vida plena, feliz y libre de dolor. Aprende a detectar posibles molestias y toma acción
1. Renuncia a moverse
- Prefiere pasarse el tiempo echado.
- Deja de subir y/o bajar escaleras
- Ya no se sube a camas o sillones
- Se reusa a que los toquen, muevan o carguen llegando a llorar, quejarse o morder.
2. Cambios de humor o de conducta
- Se torna agresivo, intolerante o apático
- Deja de hacer actividades (correr, jugar, saltar)
- Disminuye o desaparece el apetito
- Lame o muerde constantemente alguna zona de su cuerpo
3. Dificultad al desplazarse
- Comienza a caminar de manera diferente
- Cojea de alguna de sus extremidades
- Tiene dificultad para levantarse o sentarse por sí mismo.
- Se nota más encorvado de lo normal
- Presenta temblores
¿Cómo ayudarlo?
Ante alguno de estos síntomas, es importante tomar acción inmediata para evitar que tu mascota sufra o su condición empeore.
- Llévalo con su médico de cabecera o médico más cercano. Él determinará la causa del dolor y la mejor forma de ayudar a tu mascota.
- No administres ningún analgésico sin antes haber recibido indicaciones médicas.
Si tu peludo requiere de Fisioterapia, no dudes en contactarnos para iniciar un plan de tratamiento de rehabilitación que mejor se adapte a su condición.
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